EL UNIVERSAL
JUEVES 16 DE JULIO DE 2009
ALEJANDRO.MADRIGAL@ELUNIVERSAL.COM.MX
Jaime Camil tiene una carrera corta, tan sólo nueve años como actor y 10 como cantante, pero a diario la bandeja de entrada de su correo electrónico se llena de invitaciones, de guiones cinematográficos y propuestas.
El estatus profesional que ha conseguido es fruto de un trabajo arduo que comenzó en 2000, cuando la productora Carla Estrada le dio la oportunidad al incluirlo en la telenovela Mi destino eres tú.
El cineasta Fernando Kalif supo que Camil sería un actor en crecimiento y le ofreció participar en la película 7 días (2005), pero fue en 2006, en la adaptación de Yo soy Betty, la fea, cuando Jaime Camil conquistó al público con su carisma.
Fue tanta la penetración de su trabajo y el de su compañera de reparto, Angélica Vale, que el final de la telenovela acaparó la preferencia de los televidentes, superando a la 79 entrega de los Oscar, por 33.5 unidades de rating. La fea más bella obtuvo, en febrero de 2007, 43 puntos de audiencia, por 9.5 de la entrega de los premios. Y en algún momento de la noche, 67 de cada 100 televisores encendidos estaban monitoreando la telenovela.
Un fenómeno parecido se dio en 2008 con Las tontas no van al cielo, historia que Camil protagonizó junto a Jacqueline Bracamontes y Valentino Lanús y que mantuvo a lo largo de su desarrollo un promedio de 22 puntos de rating, con picos de 32, según las empresas encargadas de medir la audiencia televisiva.
Se suma a este éxito como galán pícaro, seductor y divertido el hecho de que, el año pasado, la empresa productora de películas Sony Pictures contactó a Jaime Camil para proponerle que encarne a Mauricio Garcés en la trilogía fílmica Modisto de señoras, Espérame en Siberia, vida mía y Cómo atrapar a un don Juan.
En ese entonces, Camil indicó que el contrato lo firmará “cuando la empresa tenga los derechos de explotación para hacer las películas y empezar a trabajar con Phillips Alexander e Ina Payán”.
Jaime, quien ha destacado en la comedia tanto en televisión como en el cine, incluso ya comenzó a practicar las frases clásicas “¡Arroooz!” y “Las traigo muertas!”, que hiciera famosas Mauricio Garcés, aunque el proyecto aún no se concreta.
Apuntes para una biografía
El actor de 35 años fue locutor de radio (Radioactivo 98.5 FM), tuvo su propio late night en 1996, llamado Qué nochecita con Jaime Camil en TV Azteca y en estos momentos tiene exclusividad en Televisa.
Camil se enfrenta ahora a un nuevo reto en la telenovela que se graba en Argentina, Los exitosos Pérez, al interpretar a dos personajes, uno de ellos director de teatro y el otro, un homosexual insoportable.
También lleva el rol principal en la película mexicana de René Bueno, Recién cazado. Este año participó en la película All inclusive, le puso voz a un personaje animado en el proyecto mexicano, El agente 00-P2 y terminó de filmar El soldado Pérez y Regresa. Y filmará en EU Border crosses y Dare to love me, esta última de Alfonso Arau, haciendo el papel del mejor amigo de Carlos Gardel.
—¿Qué opinas del género de comedia?
—Me gusta mucho, lo disfruto al verlo y al actuarlo. Es un género noble que usualmente gusta a toda la familia.
—La comedia te sigue de manera involuntaria y muchos de tus proyectos están basados en este género. ¿Tú buscas estos personajes?
—No, creo que ellos me buscan a mí, lo peor es que me encuentran; me gusta este género, lo disfruto y me siento como pez en el agua al hacerlo. He hecho varios géneros, pero a la comedia la respeto profundamente. Hay personas que creen que es fácil hacer reír y me atrevería a decirte que es mas difícil que hacer llorar.
—¿Eres un actor cotizado?
—Supongo que sí; recibo muchas propuestas de trabajo y guiones de cine de manera constante, por algo ha de ser, pero sobre todo me considero un working actor, un actor que siempre está activando su oficio en diversos proyectos y que siempre trata de estar ocupado, eso me gusta.
—¿Cómo te sientes en un país distinto, grabando “Los exitosos Pérez”?
—Es duro, estoy lejos de mis costumbres y de mi educación, pero es un país muy lindo y me ha recibido con los brazos abiertos y ha puesto en mi camino a amigos que seguramente se convertirán en compañeros entrañables en mi vida.
—Háblanos de tu personaje.
—De hecho son dos. Martín Pérez y Gonzalo González. El primero (Martín) es un conductor del noticiero mas famoso del país, es gay e insoportablemente pesado. El segundo (Gonzalo) es un maestro de teatro alternativo, buena persona y un tipazo. Martín tiene un accidente y le ofrecen a Gonzalo tomar el lugar de Martín sin saber al 100 por ciento en qué lío se está metiendo. Es un reto actoral importante.
—¿Aguantarás tanto tiempo grabando en Argentina?
—Sí, es muy lindo por acá y me están tratando muy bien, tanto Televisa como los argentinos, me siento como en casa.
—¿A dónde quieres dirigirte?
—Pues tengo una inquietud por dirigir y producir, quizás este año debute en alguno de esos dos puestos.
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